Return to Topic >>

8. ¿Qué es el bautismo?

Oración de apertura: Padre celestial, tu hijo Jesucristo fue bautizado, y mandó que todos nosotros también fuéramos bautizados. Ayúdame a entender mejor este gran don, y cómo obra a lo largo de mi vida. En el nombre de Jesús. Amén.

Quizás esté pensando qué tan seriamente debe considerar al bautismo. Después de todo, es un ritual, una breve ceremonia en la iglesia con los padres y padrinos, y ya está, ¿no es cierto? ¡No! ¡No es cierto! ¡El bautismo es mucho más!

El bautismo es un momento muy importante y poderoso en la vida de una persona. El bautismo es un regalo especial que Dios nos da. Tan especial, que lo llamamos de 'sacramento'. ¿Por qué? ¡Porque en él Dios nos hace hijos suyos para siempre!

Los cristianos tomamos muy en serio el bautismo, ya que es la bendición y promesa de Dios para nosotros. Por eso queremos que se bauticen tantas personas como sean posibles. Porque cuando uno tiene una buena noticia, realmente una buena noticia, ¡desea compartirla!


8.1 La palabra 'sacramento' suena como algo "sagrado". ¿Es correcto?
¡Sí! Un sacramento es un acto sagrado o santo que Dios hace por su pueblo. Es algo que les quita el pecado y los hace santos, o sagrados, y es un acto divino


8.2 ¿Cómo puede salvarme el bautismo? ¿No es Jesús es el que salva?
Sin lugar a dudas, Jesús nos salvó mediante el pago de nuestros pecados en la cruz. Pero el bautismo es un medio por el cual Dios nos da el perdón y la paz que Jesús ganó a través de su sufrimiento, muerte y resurrección.


Además, él nos da esta certeza por el bautismo, de manera que podamos saber y tener la seguridad de que su Palabra de perdón nos ha cubierto y hemos sido salvados por él.



8.3 ¿Quién está obrando en el bautismo: la persona, o Dios?
El bautismo es obra pura de Dios dirigida en su totalidad hacia la persona. Recuerde, no se trata de lo que usted dice acerca de Dios, sino de lo que la Palabra de Dios dice acerca de usted. Usted está perdonado porque Dios dice que lo está. Dios lo dice públicamente, no la persona.



8.4 ¿Por qué el bautismo no es solamente agua?
Sólo la Palabra de Dios puede perdonar nuestros pecados. Sin la Palabra de perdón de Dios, uno sólo está "nadando" sin rumbo fijo.


8.5 ¿Por qué el bautismo no involucra únicamente la Palabra?
El bautismo no es simplemente un acontecimiento espiritual en la vida de la persona, sino también un evento físico que puede ser presenciado y experimentado a través de nuestros sentidos. Dios nos recuerda que su salvación no es sólo para nuestro espíritu, sino también para nuestro cuerpo. El agua utilizada en el bautismo nos recuerda que Jesús nos ha lavado completamente, tanto el cuerpo como el espíritu. En el idioma original del Nuevo Testamento, la palabra "bautizar" es la que generalmente se usa para lavar.


8.6 ¿Hay sólo una manera de ser bautizados?
No. Lo único que se requiere es agua y la Palabra de Dios: "Yo te bautizo en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo". Cuánta agua se utiliza, dónde o cuándo somos bautizados, no importa. El agua puede ser rociada o vertida sobre la persona, o la persona puede sumergirse en ella; cualquier forma es aceptable. Algunos cristianos insisten en que el bautismo sólo es válido si el cuerpo entero es sumergido en el agua. Sin embargo, Jesús nunca requirió específicamente la inmersión, sino que ordenó que su iglesia se bautizara. Jesús mostró, por medio de su uso de la palabra "bautizar" en relación con la limpieza que se hace después de las comidas, que puede referirse a inmersión, vertimiento o aspersión.


Cuando lavaban (bautizaban) las camas, ciertamente no las sumergían.

Los "padrinos" no son imprescindibles, pero sin duda son útiles para el recién bautizado. Los padrinos existen para ayudar a los nuevos cristianos a (1) crecer en su fe, (2) comprender y utilizar la Palabra de Dios, y (3) apreciar las muchas bendiciones del bautismo. En el caso de niños pequeños, los padrinos son testigos que pueden dar fe de que el niño en realidad fue bautizado.


8.7 Si el bautismo es tan importante, ¿por qué no se menciona en el Antiguo Testamento?
El bautismo es mencionado por primera vez en el Nuevo Testamento, en el tercer capítulo de Mateo. Además, al principio de Génesis, el primer libro del Antiguo Testamento, Dios instituyó un acto sagrado que era el equivalente del bautismo en el Antiguo Testamento.

Cada descendiente varón de Abraham debía ser circuncidado a los ocho días de edad. Ese acto los incluía en el pacto de Dios con Abraham y los hacía hijos de Dios. Jesús creó un puente entre circuncisión y bautismo al ser circuncidado a los ocho días de nacido y bautizado cuando tenía alrededor de 30 años de edad.

En realidad, hay algunas historias realmente sorprendentes en el Antiguo Testamento que presagian la gracia de Dios para con su pueblo a través del bautismo con agua. He aquí algunas ocasiones en las que Dios salvó a su pueblo a través del agua, los llevó a una tierra prometida y les dio un nuevo nombre: el diluvio, en Génesis 7; los israelitas cruzando el Mar Rojo en Éxodo 14, y luego pasando por el río Jordán, en Josué 3.


8.8 ¿Por qué la mayoría de los cristianos bautizan a los niños?
Aunque algunas iglesias se oponen a esto, es la enseñanza existente desde hace mucho tiempo de la gran mayoría de los cristianos.

La Biblia nos da cuatro razones por las cuales los niños deben ser bautizados.


8.9 ¿No deben tener los niños la edad suficiente para creer?
Nadie, sin importar su edad, es capaz de creer por sí mismo. La Biblia enseña que si una persona tiene fe, esta siempre es otorgada por el Espíritu Santo.


Las Escrituras nunca se refieren a la edad en que un niño se convierte en responsable de su pecado. Por lo que vimos en el pasaje de Efesios 2:3: "Éramos por naturaleza hijos de ira, lo mismo que los demás".

El pecado está en todos nosotros (incluso desde antes de nacer):


Eso significa que somos responsables de nuestro pecado desde el momento de la concepción. La Biblia enseña que "la paga del pecado es muerte" (Romanos 6:23) y, por desgracia, los bebés también mueren. Por lo tanto, el bautismo es importante para todos, ¡incluyendo los infantes!


8.10 Si fui bautizado cuando era bebé, ¿necesito volver a ser bautizado como adulto?
¡No! A usted le dieron su nombre al nacer y es el nombre que le acompañará por el resto de su vida, ¿no es cierto? Lo mismo sucede con la promesa que Dios le hizo en su bautismo: ¡se queda con usted para siempre!


8.11 ¿Puedo ser salvo si no soy bautizado?
San Agustín, un famoso Padre de la iglesia cristiana primitiva, dijo: "Lo que nos condena no es la ausencia del bautismo, sino la ausencia de la fe". Dios deja claro que quiere que seamos bautizados, y que bauticemos. Sostener lo contrario sería rechazar la voluntad amorosa y misericordiosa de Dios hacia nosotros.


En el caso de los bebés o niños pequeños, los bautizamos primero y luego les enseñamos la fe cuando tienen la edad suficiente para entender. En el caso de niños mayores y adultos, les enseñamos la fe primero y luego los bautizamos. Esto es debido a que el Espíritu Santo crea la fe salvadora a través de la Palabra de Dios y del bautismo.


8.12 ¿Es el bautismo una entrada gratis al cielo?
El bautismo de veras nos trae la salvación de Jesús a través de la fe que el Espíritu Santo crea en nosotros. Esta es la fe en Jesucristo, que nos hace justos ante los ojos de Dios. Pero si una persona bautizada rechaza la fe y nunca más se vuelve a Jesucristo, su bautismo no lo salvará.

Sin embargo, mientras esta vida continúa, Dios sigue extendiendo su oferta de salvación. Cuando Dios nos lleva al arrepentimiento a través de su Ley, y restaura nuestra fe en Jesús a través del Evangelio, nuestro bautismo nos une de nuevo a la muerte y resurrección de Cristo. Entonces nuestros pecados son quitados, y volvemos a ser hijos de Dios.


8.13 ¿Qué significa el bautismo en nuestra vida diaria?
El bautismo nos recuerda que cada día nuestra vieja naturaleza pecaminosa, con sus malos deseos y acciones, debe ser ahogada por nuestro arrepentimiento. A través del perdón y el bautismo de Dios, somos lavados todos los días y podemos vivir una nueva vida de bondad y santidad.


Gracias al bautismo tenemos seguridad. ¡Podemos estar seguros que somos salvos por Dios, porque él así lo dice por el poder de su Palabra!Oración final: Bondadoso Padre celestial, en el bautismo nos adoptas como hijos tuyos y hermanos de tu hijo Jesucristo. Mantennos en esta fe para que podamos vivir contigo en el cielo para siempre. En el nombre de Jesús. Amén.